BLANTYRE, Malaui (AP) — El brote de cólera en Malaui ha causado más de 1.000 muertes, dijo la ministra de Salud del país, y añadió que algunas tradiciones culturales y la hostilidad hacia el personal de salud frenaban los esfuerzos para detener el contagio.
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La cifra de muertes se había elevado a 1.002 el martes, y 1.115 personas estaban hospitalizadas debido al brote que comenzó en marzo de 2022, dijo la ministra Khumbize Kandodo Chiponda. Es el peor brote de la enfermedad infecciosa transmitida por el agua en los últimos 20 años.
El país de 20 millones de habitantes registró 626 casos nuevos con 12 muertes en las últimas 24 horas, añadió.
La frustración y las suspicacias provocaron actos de violencia durante el fin de semana. Aldeanos furiosos golpearon al personal de salud y dañaron una instalación el el Centro de Salud Nandumbo en el distrito sureño de Balaka.
Los habitantes acusaron a los trabajadores sanitarios de negarles la posibilidad de enterrar dignamente a sus familiares. Obligaron a algunos trabajadores a abandonar el lugar, apedrearon las instalaciones y una sala de aislamiento y forzaron el alta de 22 enfermos de cólera.
Esnath Suwedi, vicepresidente del comité de desarrollo de la zona de Nanumbo, una autoridad local tradicional, dijo que la gente creía que los trabajadores de la salud actuaban de manera “misteriosa”.
Suwedi dijo que según los habitantes, los trabajadores usaban jeringas contaminadas para inyectar a la gente. El distrito de Balaka es una de las zonas más afectadas, con 1.450 casos y 46 muertes.
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Los ritos fúnebres también son una fuente de contagio, dijo Chiponda en su conferencia de prensa diaria.
“Por ejemplo, la gente que muere de cólera es lavada por familiares, que a continuación preparan fiestas fúnebres para familiares y amigos muy poco después de la muerte. Los brotes de cólera suelen seguir a estas fiestas”, dijo la ministra.
