PARK CITY, Utah, EE.UU. (AP) — La actriz Sherry Cola se sintió desconsolada antes del estreno de su película “Shortcomings” en el Festival de Cine de Sundance por el tiroteo en su ciudad de Monterey Park, California.
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“Lloré hasta quedarme dormida porque esta es la Monterey Park, California, donde crecí ... en el Valle de San Gabriel”, dijo Cola. “Ahí es donde está mi templo budista, todos los amigos con los que crecí nacieron en Monterey Park. Esa es mi ciudad natal de la que estoy tan orgullosa”.
“Shortcomings” cuenta la historia de tres amigos de estadounidenses ascendencia asiática que viven en la zona de la bahía de San Francisco. El tiroteo del sábado por la noche dejó al elenco — que incluye a Cola, Randall Park, Justin H. Min y Ally Maki — con la difícil tarea de conmemorar a las víctimas al tiempo que hablaban sobre la película antes de su estreno el domingo en Park City, Utah.
Un hombre armado mató a 10 personas el sábado por la noche en Monterey Park, una ciudad de unos 60.000 habitantes al este de Los Angeles en la que la mayoría de la población son inmigrantes de China o estadounidenses de primera generación. La masacre afectó las celebraciones por el Año Nuevo Lunar y desató el miedo en Monterey Park y otras comunidades cercanas con gran cantidad de astiático-estadounidenses.
Cola dijo que todavía estaba procesando sus emociones el domingo por la mañana, cuando el tirador, que se suicidó, aún no había sido encontrado.
“Es un recordatorio, ahora que estrenamos esta película hoy, la cual celebra voces asiático-estadounidenses sin tapujos, auténticas, de una manera diferente, es solo un recordatorio de que todavía debemos apropiarnos de nuestra validación como seres humanos en este país y en esta industria”, dijo Cola.
“Creo que hablar de ello es hacer avanzar a la cultura y a la comunidad, simplemente ser amables los unos con los otros y cuidarnos los unos a los otros, es todo lo que podemos hacer”, dijo.
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Park, quien dirigió la película, agregó “Sin importar la información que surja después, esto es tan indignante”.
En una sala cercana en Sundance se guardó un minuto de silencio por las víctimas.
