MOSCÚ (AP) — Investigadores rusos allanaron el miércoles la vivienda de Ksenia Sobchak, hija del otrora jefe de Vladimir Putin, en una medida que ha estremecido el mundo político del país.
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Sobchak, una estrella televisiva de 40 años de edad, ha sido una frecuente crítica del presidente Putin, pero algunos opositores la consideran un proyecto del Kremlin. En el 2018, fue candidata en las elecciones presidenciales, llegando en un distante cuarto lugar con 1,7% de los votos, en lo que los críticos calificaron de un intento del Kremlin por darle un barniz democrático a la reelección del mandatario.
Los investigadores dijeron que el allanamiento a la lujosa vivienda de Sobchak en un acaudalado suburbio de Moscú fue parte de una pesquisa sobre presuntos delitos de su director de medios, Kirill Sujanov, quien fue arrestado y acusado de extorsión.
Sobchak el martes rechazó las acusaciones contra Sujanov como “disparatadas y sin sentido”, y calificó el arresto como un esfuerzo de las autoridades por amordazar a la prensa independiente.
Las agencias estatales Tass y RIA-Novosti reportaron que Sobchak huyó de Rusia. Tass afirmó que compró boletos a Dubái y Turquía para despistar a las autoridades, pero se fue a Bielorrusia y de allí a Lituania.
Sobchak no ha comentado sobre las acusaciones y se desconoce su paradero.
Ella es hija de Anatoly Sobchak, quien fue alcalde San Petersburgo en la década de 1990. Putin era su subalterno.
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Sobchak tiene 9,4 millones de seguidores en Instagram y su glamour, astucia y actitud rebelde le han ganado admiradores y detractores.
Inicialmente, cobró fama como elegante dama de sociedad y estrella de “reality TV”, y le decían “la Paris Hilton de Rusia”. Pero luego hizo esfuerzos por cambiar su imagen de arrogante niña rica.
Sobchak se involucró en la política cuando se incorporó a las masivas protestas contra Putin en los años 2011-12, y luego pasó a ser una periodista televisiva y activista opositora.
Sobchak ha negado haber sido manipulada por el gobierno al postularse en las elecciones del 2018. Pero el líder opositor Alexei Navalny la ha calificado de “parodia de una candidata liberal” y ha denunciado que su campaña ayudó al Kremlin a deslegitimar a la oposición.