MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
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Los incidentes provocaron diversos daños en el mobiliario de locales situados en la calle Peñaherbosa, en una de las zonas de ocio de la capital cántabra, donde por la mañana se produjeron concentraciones de aficionados de ambos equipos.
Según han informado este jueves fuentes policiales, en esas concentraciones un grupo de unos "30 radicales" de aficionados locales pertenecientes a las Juventudes Verdiblancas se acercó "de forma grupal, organizada, cohesionada y agresiva" por una de las calles donde se encontraban los aficionados del equipo visitante, produciéndose un enfrentamiento entre ambos, consistente en el lanzamiento de botellas, latas, bengalas y otros efectos como mobiliario de los bares del lugar.
Ante estos hechos, que según la Policía tuvieron una duración de "unos 40 segundos aproximadamente", efectivos de la Unidad de Intervención Policial restablecieron "inmediatamente" el orden.
Este partido de Segunda División entre el Racing y el Oviedo había sido catalogado "de alto riesgo" por la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo y la Xenofobia en el Deporte, debido a los incidentes registrados en encuentros anteriores entre aficionados de ambos clubes y la rivalidad existente, especialmente entre las aficiones radicales de las Juventudes Verdiblancas y los Symmachiarii.
Por este motivo, según la Policía, se desplegó un dispositivo especial de seguridad compuesto por efectivos de la Unidad de Prevención y Reacción, Grupo de Atención al Ciudadano, Brigada Provincial de Información, Unidad de Guías Caninos y Unidad Especial de Caballería, que fue reforzado por miembros de la Unidad de Intervención Policial, con el fin de "garantizar la seguridad ciudadana y evitar enfrentamientos entre ambas aficiones".
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Tras los disturbios, los agentes iniciaron las investigaciones para localizar a los presuntos autores de los altercados, consiguiendo identificar a los cuatro miembros de las Juventudes Verdiblancas participantes, que fueron detenidos el pasado 5 de septiembre.
Los detenidos, uno de ellos con antecedentes, fueron puestos en libertad una vez que prestaron declaración, con la obligación de personarse ante el juez cuando sean requeridos.
La Jefatura Superior de Policía de Cantabria, en colaboración con la de Asturias, continúa las gestiones para conseguir el total esclarecimiento de los hechos y la identificación del resto de participantes en los disturbios entre ambas aficiones.
Por parte de Policía Nacional, se dará oportuna comunicación a la Oficina Nacional del Deporte, toda vez que los hechos pudieran estar recogidos dentro de los supuestos de la Ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el Deporte.
