Elon Musk podrá incluir las declaraciones de un denunciante de Twitter como evidencia en su intento por librarse del acuerdo para comprar la plataforma de redes sociales, pero no podrá demorar el juicio pautado para octubre, falló el miércoles la jueza a cargo del caso.
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La jueza Kathaleen St. Jude McCormick en Vermont denegó el pedido de Musk de postergar el juicio por cuatro semanas, pero permitió que sean presentadas las declaraciones de Peiter “Mudge” Zatko, quien debe comparecer ante el Congreso la semana próxima para hablar de las deficientes prácticas de ciberseguridad de la compañía.
Twitter ha demandado a Musk, el multimillonario CEO de Tesla y le ha pedido al tribunal de Delaware que le obligue a cumplir el acuerdo pactado en abril de comprar la compañía por 44.000 millones de dólares. Musk ha presentado una contrademanda y el juicio debe empezar en la semana del 17 de octubre.
El equipo legal de Musk sostiene que las denuncias hechas por Zatko a las autoridades estadounidenses confirmarán sus reclamos de que Twitter lo engañó en cuanto a la proliferación de cuentas falsas y de “spam”. Zatko, un reconocido experto en temas de ciberseguridad, dice que Twitter lo despidió en enero por haber alertado sobre la negligencia de la red social en cuanto a la protección de la seguridad y privacidad de sus usuarios.
El fallo de la jueza se produjo luego de una sesión de varias horas el martes en la que los abogados de Musk y los de Twitter discutieron sobre la veracidad de las denuncias de Zatko y el ritmo con el cual cada lado ha estado presentando pruebas antes del juicio.
Los abogados de Twitter trataron de minimizar las denuncias de Zatko, argumentando que la queja inicial de 27 páginas que él envió a Twitter y su posterior denuncia de represalia no mencionó el tema de las cuentas “spam”, sobre las cuales Musk ha basado sus argumentos para abandonar el acuerdo. Zatko “nunca dijo ni una palabra sobre cuentas spam o bots” hasta que habló con las autoridades, sostuvo William Savitt, abogado de Twitter.
Twitter sostiene que los argumentos proferidos por Musk para abandonar el acuerdo no son más que una excusa y que trata de librarse del trato por el cual accedió a pagar 38% por encima del precio de las acciones de Twitter, antes de que el mercado cayera y las acciones de Tesla, donde Musk tiene la mayoría de su riqueza, perdieran más de 100.000 millones de dólares de su valor.