PARÍS (AP) — Se lo ve cansado. Sin afeitarse. Con jeans y capucha. En plena campaña electoral, el presidente francés Emmanuel Macron difundió fotos en las que aparece trabajando de noche y los fines de semana en el Palacio de los Elíseo, donde se pasa la mayor parte del tiempo concentrado en la invasión rusa de Ucrania, evitando las actividades típicas de un candidato.
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Si esa es una estrategia electoral, parece estar funcionando, reforzando su condición de favorito para ser reelegido y dificultando la tarea de sus rivales.
Macron fue criticado por otros candidatos por no participar en debates televisivos antes de la primera ronda, pautada para el 10 de abril.
Un funcionario de su gobierno dijo que Macron responderá a todas las preguntas, incluidas las relacionadas con una polémica reforma que elevaría la edad para jubilarse de los 62 a los 65 años, y que pronto se incorporará a la campaña.
Si bien anunció que buscaría la reelección a principios de mes, todavía no ha participado en ningún acto de campaña.
En los últimos días mantuvo conversaciones telefónicas con el presidente ruso Vladimir Putin en las que promovió un cese al fuego y habló casi a diario con el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy.
La semana pasada reunió a líderes de la Unión Europea en el Palacio de Versalles, en las afueras de París, para hablar de posibles sanciones a Rusia. Francia ejerce la presidencia rotatoria del Consejo de la Unión Europea, lo que da a Macron un papel clave en la coordinación de la respuesta del bloque de 27 naciones a la invasión.
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Se espera que la semana que viene se vea con el presidente estadounidense Joe Biden, quien vendrá a una cumbre de la OTAN en Bruselas.
Bernard Sananes, presidente del instituto de encuestas Elabe, dijo que “obviamente la situación internacional eleva su estatura”.
“Me da la sensación de que en el 2017 Macron fue elegido con la promesa de renovar (la política) y que en el 2022 Macron quiere ser elegido a partir de su experiencia”, manifestó en una entrevista con el diario francés L’Opinion. Destacó que las encuestas indican que la mayoría de los franceses, piensen votar por él o no, creen que está a la altura del cargo.
Macron le saca 10 puntos porcentuales a la candidata de extrema derecha Marine Le Pen. Ambos son favoritos para avanzar a una segunda ronda, como en el 2017. En la vuelta decisiva, Macron lleva también las de ganar, de acuerdo con las encuestas.
La lista de candidatos incluye al derechista Eric Zemmour, a Jean-Luc Mélenchon, de extrema izquierda, y a la conservadora Valérie Pécresse.
Sus rivales acusan a Macron de prestar demasiada atención a la situación en Ucrania para evitar hablar de temas nacionales que pueden ser más problemáticos.
“Usa la guerra en Ucrania para asustar a los franceses, porque piensa que eso lo beneficiará”, sostuvo Le Pen.
“Cuando hay una guerra, se tiende a ser legitimista”, expresó Pécresse. “La gente piensa: Hay un capitán a cargo. (Pero) No debemos tener miedo de cambiar el capitán el 11 de abril”.
Partidarios de Macron dicen que la situación en Ucrania involucra temas de interés nacional que están siendo debatidos en la campaña, como la política energética y militar.
El historiador Jean Garrigues destaca el “impacto unificador” en torno a un jefe de estado que tiene un conflicto bélico. Recuerda que lo mismo sucedió cuando el predecesor de Macron, Francois Hollande, lanzó una operación militar en Malí para derrocar a extremistas islámicos en el poder.
Antes que él, las grandes figuras históricas de Francia demostraron sus condiciones de líderes en épocas de guerra, desde Napoleón hasta Charles de Gaulle. “La opinión pública francesa tiene una fuerte raíz histórica”, dijo Garrigues a la AP.
“Se puede ver”, agregó, “que los adversarios de Macron no tienen una experiencia equivalente, ni siquiera como ministros, y, de hecho, están en una situación de inferioridad”.
Los encuestadores creen que lo que más puede perjudicar a Macron es una baja participación, que sus partidarios no acudan a las urnas pensando que tiene la victoria asegurada, mientras que la gente molesta con él sí se movilizará.
El propio Macron admitió esa posibilidad en un video que su campana difundió a través de YouTube. “Eso es lo que voy a decirle a los franceses y a mis partidarios: Si piensan que ya ganamos, perdimos”.