SANTIAGO (AP) — El moai Tau lleva 152 años lejos de casa, pero pronto cruzará el Pacífico para abandonar la capital de Chile y volver a su hogar en Rapa Nui.
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A pocos días de que esta estatua monolítica abandone el Museo Nacional de Historia Natural (MNHN) de Santiago, se inició el ritual para su retorno. Los moai son los principales atractivos turísticos de la isla, que lleva cerrada más de dos años a visitantes por la pandemia.
El retorno, que se concretará en un desplazamiento en barco desde el puerto de Valparaíso el 28 de febrero, se enmarcará en el “Programa de Repatriación Ka Haka Hoki Mai Te Mana Tupuna”, que trata de restituir a la isla que se sitúa a cinco horas de vuelo del territorio continental chileno “los cuerpos de sus ancestros, sus objetos sagrados y funerarios”. Para los isleños los moai representan el espíritu de sus antepasados y se cree que poseen energía ancestral que puede tener vida propia. Algunos incluso los consideran la encarnación de una persona.
“Tanto para mi pueblo como para mí es muy importante la repatriación del moai, de todos los restos (arqueológicos)”, declaró a The Associated Press Verónica Tukihit, habitante de la isla polinésica, a más de 3.700 kilómetros de Chile continental.
Las gestiones para este viaje de vuelta se iniciaron a finales de 2018, cuando el Consejo de Ancianos y Comunidad Indígena Ma’u henua que representa a la comunidad Rapanui solicitó formalmente su regreso en una carta al Ministerio.
El viaje del moai Tau, sin embargo, no va a ser nada sencillo. Tallado en roca basáltica, pesa 715 kilos y se encuentra sobre una plataforma de 230 más. Para su traslado, del que se encargará un equipo multidisciplinar del museo, el Centro Nacional de Conservación y Restauración de Astilleros y Maestranzas de la Armada, se construyó una nueva base de metal, lo que sumado al embalaje especial de protección supondrán 1.255 kilos.
El moai, el más antiguo de los que existían en el museo, llevaba en el continente chileno y en la institución desde 1870, cuando fue regalado por el marino francés Jean Baptiste Dutrou-Bournier a la tripulación de una corbeta, que solo pudo llevarse el más pequeño de todos.
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“Hoy es un día inédito. Por primera vez retornará un moai a la isla desde el continente. Sin duda se enmarca en un trabajo que como Ministerio iniciamos hace años con el retorno de diversas colecciones y ancestros a su tierra natal”, señaló en el acto de despedida Consuelo Valdés, ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio chileno. Este proceso “no es solo un bien cultural, sino retornar un ancestro e instalar una nueva forma de relación del Estado con la comunidad Rapa Nui”, añadió.
“Como museo es de gran importancia para nosotros poder ser partícipes en el proceso de retorno de este moai a la isla de Pascua”, expresó Cristián Becker, director y jefe curatorial y científico del MNHN. El “feliz desenlace será el reencuentro del moai Tau con el pueblo Rapa Nui. Creemos también que este proceso es profundamente significativo como un gesto hacia nuestros pueblos originarios”, añadió.