ESTAMBUL (AP) — Los equipos de rescate se esforzaban el martes para despejar las principales carreteras de Estambul y sus alrededores, atascadas tras una enorme tormenta de nieve que azotó la ciudad y dejó a innumerables personas y autos varados durante la noche con temperaturas bajo cero.
PUBLICIDAD
Las autopistas y carreteras de la ciudad quedaron paralizadas el lunes tras la tormenta que azotó Estambul, una ciudad con unos 16 millones de habitantes a caballo entre Europa y Asia. En algunas zonas se acumularon más de 80 centímetros (31 pulgadas) de nieve.
Los conductores varados o bien pasaron la noche en sus coches, o los dejaron atrás y regresaron a casa caminando o en los atestados metros y transportes públicos. Unos pocos afortunados fueron rescatados y llevados a hoteles.
El Centro de Coordinación de Desastres de la Ciudad, o AKOM, dijo que un sistema de bajas presiones islandés estaba detrás del frente frío y de las precipitaciones que afectan a la mayor parte del país. La tormenta ya causó el caos en la vecina Grecia, donde colapsó el tránsito en Atenas y dejó fuera de servicio casi todo el transporte público.
Se espera que las nevadas continúen hasta el miércoles. El alcalde de Estambul, Ekrem Imamoglu, dijo que por la noche podrían volver a registrarse nevadas intensas.
Los equipos del AKOM y otras unidades trabajaron durante la noche para limpiar las carreteras y autopistas, pero los vehículos abandonados obstaculizaron su labor. El gobernador de Estambul, Ali Yerlikaya, pidió a los conductores que regresen a sus autos para moverlos.
La suspensión de los vuelos en el principal aeropuerto de Estambul, decretada el lunes, se amplió hasta las 13:00 del martes por seguridad, y la oficina del gobernador prohibió el uso de vehículos privados hasta entonces. El segundo aeropuerto de la ciudad, Sabiha Gokcen, operaba con servicios limitados.
PUBLICIDAD
“No se mueve nada. Los quitanieves no pueden llegar siquiera a donde estamos», dijo por teléfono a The Associated Press Ahmet Odabasi, de 40 años y una de las miles de personas que pasó la noche varado en una autopista al oeste de Estambul.
“Llevo atrapado aquí 12 horas. Tengo suerte de tener gasolina, comida y agua», agregó el conductor, que se dirigía a Estambul desde la ciudad de Edirne, cerca de la frontera con Grecia.
El director del AKOM, Selcuk Tutuncu, contó a la AP que “hay más de 1.500 vehículos y 7.000 efectivos trabajando sin descanso sobre el terreno”.