¿Sufres de dolor abdominal, distensión y gases? Si tu respuesta es positiva, podrías estar padeciendo de colon irritable, una enfermedad que no se cura, pero que puede aliviarse con tratamiento y una alimentación adecuada.
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El síndrome de colon irritable también se conoce como colitis mucosa, colon espásico y colon irritable. Afecta al estómago y los intestinos. Muy pocos casos son graves. Mayo Clinic precisa que entre sus síntomas están el dolor abdominal, cólicos, distensión o hinchazón abdominal, gases, diarrea o estreñimiento.
Esta patología es más frecuente en mujeres que en hombres. Puede comenzar a manifestarse en la adolescencia o al inicio de la edad adulta. Por momentos, las mujeres pueden confundirlo con el dolor menstrual, ya que a veces, las molestias pueden sentirse en el vientre o parte baja del abdomen.
El citado medio indicó que otra señal de esta enfermedad es el cambio en la forma y frecuencia de las deposiciones.
“La distensión abdominal y el meteorismo se desarrollan progresivamente a lo largo del día y son referidas como “exceso de gases”. Son frecuentes la saciedad precoz tras la ingesta, las náuseas, los vómitos y el ardor torácico (pirosis)”, dice el portal de la Clínica Universidad de Navarra.
Quien lo padece puede sentir que sus evacuaciones son incompletas. No es de extrañar que tenga moco en sus heces.
Causas
Medline Plus expuso que no son claras las causas del síndrome de colon irritable, aunque en muchas ocasiones se asocia después de una infección intestinal, bacteriana o por parásitos yardiasis.
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Otro factor de riesgo es el estrés, ya que el estado de ánimo está relacionado con los intestinos, estos son sensibles, así que pueden contraerse o comprimirse durante un proceso estresante.
Alimentación
La alimentación es determinante para disminuir los síntomas del colon irritable. Las molestias pueden desaparecer casi por completo si eliminan o minimizan al máximo los alimentos que empeoran esta condición.
En las etapas de crisis fuertes es mejor eliminar totalmente las comidas que afectan el colon irritable. Cuando hay mejoría, pueden consumirse, pero sólo al mínimo.
Los alimentos contraindicados para alguien con esta patología son los lácteos (por la lactosa), el café, el chocolate, el licor, picantes, flatulentos como los granos, la col, coliflor,el brócoli y las coles de Bruselas. También hay que evitar las verduras crudas, la cebolla, el ajo, las grasas, bollería, alimentos procesados y charcutería.
¿Qué comer? El portal del Centro de Nutrición Júlia Farré expresa que los alimentos indicados son la patata, la avena, la quínoa, lácteos sin lactosa, huevos, carnes no procesadas, pescado, pollo, almendras, arroz, zanahoria, tomates, plátano, arándanos, mandarinas, arroz y maíz.
La lista de alimentos presentados contraindicados e indicados es general. Sin embargo, algo que caracteriza al colon irritable, es que no todas las personas que lo padecen, tienen la misma tolerancia a los mismos alimentos. Lo que a alguien le puede caer bien, quizá le haga daño a otra persona. De allí, la importancia de que cada quien, esté al pendiente de las comidas que le perjudican, para que así pueda evitarlas y poder mejorar.
Si los síntomas persisten, el consejo es ir a consulta con un gastroenterólogo, quien colocará medicamentos y guiará en cuanto a una dieta personalizada.