Dicen que todo en exceso es malo. Si bien es cierto que mantenernos hidratados es bueno para el organismo, abusar de grandes cantidades de agua puede ser perjudicial para la salud. Aunque parezca increíble, el consumo desmedido de agua puede provocar algunas enfermedades que generan malestares como náuseas, mareos, confusión y dolores de cabeza.
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Los especialistas del portal médico Clínica Mayo señalan que al tomar demasiados vasos, los riñones no pueden deshacerse del exceso de agua. “El contenido de sodio en la sangre se diluye. Esto se conoce como hiponatremia y puede poner en riesgo la vida”, explica la página.
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Mencionan que la hiponatremia se origina cuando la concentración de sodio en la sangre es anormalmente baja. “El sodio es un electrolito y ayuda a regular la cantidad de agua que hay dentro y alrededor de las células”, indican los expertos.
Además destacan que el sodio ayuda a mantener una presión arterial normal y apoya el trabajo de los nervios y músculos, a la vez que regula el equilibrio de líquidos en todo el organismo. Agrega también que en una hiponatremia aguda, los niveles de sodio disminuyen rápidamente, causando efectos potencialmente peligrosos, como una rápida inflamación cerebral, que puede derivar un estado de coma o la muerte.
¿Cuánta agua debo tomar al día?
La Organización Mundial de la Salud sugiere que los seres humanos deben consumir entre uno y medio y dos litros de agua al día, ya que es un elemento primordial en cualquier etapa de la vida, porque favorece la regularización de la temperatura del cuerpo, preserva la elasticidad e hidratación de la piel, lubrica las articulaciones, los órganos internos y activa la digestión.
Se recomienda que los hombres tomen aproximadamente 13 tazas de líquido al día y las mujeres requieren 9. Aunque el agua es la mejor opción para estar hidratado, algunas otras bebidas como lácteos y jugos son válidas. Puedes completar con frutas ricas en alto contenido de agua como la sandía y vegetales como la lechuga, tomates y pepinos.
