El flujo vaginal es normal en las mujeres. Se trata de un revestimiento, cuya función es proteger el órgano íntimo ante cualquier agente extraño que pueda propiciar infecciones o alguna enfermedad.
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El flujo no solo protege, sino que lubrica la vagina al momento de las relaciones sexuales, facilitando la excitación. No tener flujo en ninguna fase del ciclo menstrual, o tenerlo muy poco, sería anormal, por lo que podría ser un motivo de acudir a una cita ginecológica.
Cada mujer varía en cuanto a la cantidad, consistencia y color de su flujo vaginal. Lo normal es que sea transparente, quizá con un ligero tono blanco o amarillento. Su consistencia debe ser parecida a la de una clara de huevo. No debe tener olor.
Si el flujo tiene un color distinto, una consistencia o un mal olor, eso no es normal y debes acudir cuanto antes a un médico.
Remedios para flujo excesivo
El portal Sanitas explicó que al exceso de flujo vaginal se le conoce como leucorrea y que es muy frecuente en mujeres. No necesariamente es algo anormal; siempre cuando sea inoloro y tenga un color adecuado, no hay problemas. Sin embargo, es algo incómodo para la mayoría de las féminas.
Mejor con Salud publicó sobre algunos remedios naturales para frenar el flujo vaginal excesivo. Algunos de ellos son:
-Yogur natural y miel
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El yogur es un buen producto porque contiene bacterias buenas conocidas como Lactobacilos que combaten los microorganismos. Se pueden mezclar dos cucharadas y una con miel. Se aplica alrededor de la zona íntima, se deja actuar durante cinco minutos y se quita con agua tibia. Se puede aplicar una vez al día, todos los días. También puede ingerirse.
-Agua de arroz
El referido medio afirmó que combate “la irritación y comezón causados por las infecciones en la vagina”. Recomienda cocinar seis cucharadas de arroz en la medida de tres vasos con agua durante 10 minutos. El agua se usa para lavar la parte externa de la vagina.
-Vinagre de manzana
Sirve para tratar las infecciones por levadura y alivia las molestias por infecciones vaginales, ya que es antimicrobiano y antifúngico. Se puede diluir ½ taza de vinagre de manzana (125 ml) en 3 tazas de agua (750 ml). Con esa mezcla, se enjuaga la zona exterior de la vagina. Además, se aconseja tomar un vaso de agua con una cucharada de este vinagre.
-Cúrcuma y leche
La cúrcuma es conocida por ser antiséptica y antiinflamatoria. Se combina una cucharada en polvo con tres de leche. Con esto, se masajea la parte exterior de la vagina. Se puede usar dos veces al día.
Todas estas son opciones naturales. Sin embargo, es importante acudir al médico, ante cualquier molestia que consideres que no es normal.
