Rey Carlos y la reina Camila son recibidos con huevos y abucheos durante una salida oficial en York

Con la muerte de la reina Isabel II, cayó probablemente el último bastión de la monarquía dentro de la cultura popular del mundo y prueba de esto ha sido el constante descontento que se ha visto con el rey Carlos y la reina Camila, quienes recientemente fueron víctimas de un curioso ataque.

El futuro de la familia real británica parece bastante incierto, especialmente en medio de la crisis que atraviesa el país y muchos han comenzado a sumarse a la vertiente de opinión que no apoya mucho a los royals, entre ellos este hombre que no dudó en lanzar un huevo al rey y la reina durante su visita oficial a York, causando un gran caos.

Le lanzan huevos al rey Carlos y la reina Camila en medio de su paseo oficial por York

Las imágenes de lo sucedido no tardaron en colarse en las redes sociales y volverse virales, generando gran sensación y curiosidad por el hecho. Se trataba de un intento en solitario del que los medios locales han llamado el “hombre huevo”, quien no lanzó uno, sino tres contra la pareja real, fallando en cada intento.

Por supuesto y como era de esperarse, la policía si fue bastante precisa y arrestó al hombre de inmediato. En algunos de los videos se puede ver cómo la multitud se reunía detrás de las barreras alineadas a lo largo de la acera cuando el hombre gritó y atacó.

“Este país fue construido sobre la sangre de los esclavos” fue la consigna del “hombre huevo”, las autoridades afirmaron que no hay de qué preocuparse y que se generó un perímetro de seguridad en torno al rey y la reina de inmediato, evitando mayores disturbios.

El paseo del rey no fue arruinado

Hasta el momento se desconoce si se levantarán cargos contra el hombre, pero lo cierto es que se mantiene bajo vigilancia de policías. Por otro lado, los presentes no le dieron mucha importancia al asunto y no tardaron en afirmar “¡Dios salve al rey!” y seguir con la celebración.

Carlos y Camila se encontraban en York para inaugurar una estatua de la difunta reina Isabel II y fue el arzobispo de York, Stephen Cottrell quien recalcó que “Es algo realmente bueno para York que el Rey esté aquí. Es un momento muy significativo y muy emocionante”.