Un inesperado regalo recibió Alberto, un hombre de 76 años, luego que en pleno Año Nuevo un nieto le regalara un automóvil.
PUBLICIDAD
Según consigna TN, el hombre de la localidad argentina de General Pico se jubiló como mozo tras trabajar durante toda su vida y hace unos meses había enviudado. Sin embargo, pese a su esfuerzo, nunca logró comprarse un vehículo.
Esta situación siempre estuvo en la mente de Gonzalo, su nieto de 33 años y quien trabaja como empleado administrativo, mientras que los fines de semana es DJ.
Siempre escuchó a su abuelo hablar que le gustaban los autos antiguos ya que los consideraba “irrompibles”, por lo que un día decidió hablar con un amigo que tenía un Renault 12 modelo 93, a quien le señaló que si un día lo vendía, le avisara.
Esto ocurrió hace tres años y desde ese día comenzó a juntar dinero para poder cumplirle el sueño a Alberto.
Y hace unos días su amigo le avisó que lo pondría en venta. Ante esto, se dio cuenta que le faltaba dinero, así que colocó su moto en venta y así logró juntar todo el monto.
Tras esto, organizó junto a su familia una fiesta especial para Año Nuevo, para así poder sorprender a su abuelo.
PUBLICIDAD
“Mi abuelo enviudó hace dos meses, y no quería que se sintiera triste para las Fiestas. Por ese motivo alquilé una quinta para recibir el Año Nuevo en familia. Puse luces y elegí la música adecuada para que ese momento fuese inolvidable para todos”, señaló a TN y su Gente.”
“Vos sabés que yo la semana pasada estuve hablando con Papá Noel y le dije que necesitaba un regalo para mi abuelo. Mandámelo a General Pico, La Pampa, que se lo voy a entregar el 31 a la noche. Así que, abuelo, espero que disfrutes este regalo. Vos sabés que te quiero mucho. Esto va de parte mía. Este es un regalo pendiente que tenía desde hace varios años. Vamos a ver qué te trajo”, señaló Gonzalo en un video que registró el momento en que sorprendió a Alberto.
Tras esto, sonó la canción Color Esperanza y luego comenzaron a escucharse unos bocinazos. Finalmente, el joven apareció manejando un auto, tras lo cual se bajó y le entregó las llaves a su abuelo, quien agradeció el gesto.
“Fue un momento muy especial porque verlo sonreír a mi abuelo es hermoso. Él siempre ayudó a todos sus nietos, y se merecía una recompensa. Estoy feliz por él. Igualmente, nada de lo que pueda hacer será suficiente para agradecerle las horas de juego que me dedicó y las enseñanzas que me dejó”, remató el nieto.