Hoy se cumplen quince años de la partida de Lola Vilar, actriz española que se afincó en el Perú y se constituyó como un gran aporte al desarrollo del teatro peruano durante la segunda mitad del siglo XX.
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Lola Vilar se convirtió así en una de las más grandes figuras del teatro y la televisión desde mediados de los años 60, y supo ganarse el corazón de todos los peruanos.
En vida, su tenacidad e ímpetu le permitieron superar muchos momentos difíciles como la guerra civil española que la obligó a dejar su país y trasladarse a Cuba, de donde también tuvo que partir durante la Revolución Cubana, perdiendo todo lo que había ganado hasta entonces.
Gracias a su hermano Pepe Vilar, llega a Lima, la ciudad que la acogería definitivamente.
En 1971, fundó la Compañía Teatral de Lola Vilar, junto a su esposo Leonardo Torres Descalzi, la cual funcionó hasta mediados de la década de los 90.
El talento que llevaba en la sangre le permitió participar en más de 100 montajes teatrales en el Perú, Cuba y España, muchos de ellos con gran éxito, entre los que destacan ‘Filomena Marturano’, ‘La malquerida’, ‘Vamos a contar mentiras’ y ‘Hello Dolly’.
Su éxito no pasó desapercibido. A través de un Real Decreto, el Rey de España le otorgó el Lazo de Dama de la Orden de Isabel La Católica en 1988 por su trayectoria artística, labor cultural y por estrechar los lazos de amistad entre Perú y España.
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Lola Vilar también incursionó en el cine y la televisión, participando en todo tipo de géneros y formatos. En los 90, entró a los hogares peruanos con los programas de mediodía ‘Entre Nosotras’ y ‘Simplemente Lola’, donde desplegó el carisma, la energía y la franqueza que la caracterizaban.
La actriz falleció a los 69 años en agosto del año 2000 por una enfermedad renal que se complicó con diabetes e hipertensión.
