El seleccionador Miguel Herrera dijo este viernes que los gritos homófobos de hinchas mexicanos en los partidos de fútbol no son graves y tienen como objetivo presionar al rival, un día después de que la FIFA abriera una investigación sobre el tema.
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“Me parece que no es algo grave. Si vemos que cada vez que hay una expulsión o una mala marcación, al pobre árbitro le dicen de todo, habría que multar cada partido a los equipos. Entonces me parece que no pasa por ahí”, dijo el técnico en una rueda de prensa.
“Hay cosas más importantes que solucionar que una expresión de una presión a un arquero que se hace en México desde hace tiempo (…) Estamos con nuestra afición”, añadió.
En México, espectadores en las canchas de fútbol suelen gritar el término “puto”, una forma despectiva de llamar a las personas homosexuales, al portero rival cuando hace un saque de puerta.
La FIFA anunció el jueves que investiga a México por “conducta inapropiada de hinchas” tras informaciones de prensa de que gritaron insultos homófobos contra el portero de Camerún durante el partido de la primera jornada del Mundial el 13 de junio en Natal.
La portavoz de la FIFA, Delia Fischer, se limitó a explicar que el organismo fue contactado por FARE, una organización no gubernamental que lucha contra la discriminación en el fútbol, tras el partido entre México y Camerún, al que asistieron decenas de miles de aficionados mexicanos.
Sobre la investigación de la FIFA, Herrera prefirió no hacer comentarios.
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“No tenemos nada que decir, nos tenemos que centrar en trabajar, en que el equipo gane, es lo que nos corresponde a nosotros”, dijo el técnico antes de iniciar el entrenamiento matinal en su centro de concentración en la ciudad brasileña de Santos (sur).
Vieja polémica
En México, la controversia por el uso de este insulto en las canchas viene de lejos.
Se cree que el grito empezó en el estadio de las Chivas de Guadalajara en 2004 durante un partido de eliminatorias para los Juegos Olímpicos de Atenas de ese año entre México y su vecino Estados Unidos.
Con la afición azteca aún dolida por la eliminación del Tri por su vecino y archirrival en el Mundial de Japon y Corea-2002, un sector del público empezó emplear el insulto cuando el arquero rival pateaba los tiros de puerta.
El resto del estadio se le unió y el término se fue popularizando en el país. Hoy en día es habitual escucharlo en las canchas mexicanas.
El director deportivo de la selección mexicana, Héctor González Iñárritu, dijo al diario Récord que ya han dirigido una carta a la FIFA explicando que se trata de una “costumbre” en el fútbol mexicano y que no pueden actuar contra la libertad de expresión de los hinchas.
“Nosotros explicamos que no es una ofensa directa, es una expresión normal que se ha hecho una costumbre en el futbol mexicano. Mucho menos se trata de un grito de homofobia. Cada futbol tiene sus costumbres y esa es una de las nuestras”, dijo González Iñárritu.
“La Federación está imposibilitada de coartar la expresión de la afición, no podemos hacer nada ni jurídica ni administrativamente ni deportivamente hablando”, agregó.
En México, el organismo público contra la discriminación ha reclamado acciones de los dirigentes deportivos y les ha recordado que se comprometieron a aplicar el protocolo de la FIFA para casos de racismo y homofobia.
“El grito de ‘puto’ es expresión de desprecio, de rechazo. No es descripción ni expresión neutra; es calificación negativa, es estigma, es minusvaloración. Homologa la condición homosexual con cobardía”, subrayó el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) en un comunicado.
“Decir que su uso es una costumbre o tradición (…) además de erróneo es irresponsable”, señaló el organismo, que denunció que ese grito colectivo “refleja la homofobia, el machismo y la misoginia que privan aún en nuestra sociedad”.
Los jugadores de México todavía no han podido ser cuestionados sobre el asunto desde que se conoció la investigación de la FIFA pero el mediapunta Marco Fabián (Cruz Azul) se preguntó en Twitter “¿será que necesitamos un nuevo grito para México?”.
“Yo no creo pero ¿cuál sería su idea o propuesta”, preguntó Fabián a los casi 655.000 aficionados que le siguen en la red social.