En la camiseta de los miembros del equipo de Anderson Silva está estampada la frase ‘Anderson Knows’. Y ‘Spider’ realmente sabe que, a pesar de la fama y los títulos, es un ser humano. Por eso, habla con naturalidad sobre la derrota sufrida ante el estadounidense Chris Weidman en julio pasado, que terminó con su reinado de siete años en la categoría de peso medio de la UFC (Ultimate Fighting Championship), organizadora de los más importantes eventos mundiales de MMA (artes marciales mixtas).
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Entrevistamos a Silva en un local de Burger King (su patrocinador) de Sao Paulo y el ex campeón habló de todo. Como para romper el hielo, le preguntamos sobre su voz de pito. ‘Ya sabes lo que pasa si te burlas de mi voz, ¿no?’, dijo con una sonrisa.
Tu derrota ante Weidman terminó con la polémica. ¿Cómo lo tomaste? Es normal tener polémicas en esta actividad. Estuve siete años sin perder, algo que la gente pensaba que era imposible. Pero yo siempre me sentí alguien normal. Puedo fallar en cualquier momento y perder. Creo que al final fue bueno, para que las personas vean que soy un ser humano normal.
¿Cómo estás planeando la revancha? Me voy a Japón y después a Tailandia a seguir entrenando. Aún es muy pronto para hablar de otra pelea. Voy a comenzar los entrenamientos intensivos y dejaré que las cosas fluyan.
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Después de la pelea dijiste que no habría revancha. ¿Por qué has cambiado de opinión? Hablé en caliente tras la pelea. Mi contrato era por diez peleas con una cláusula que decía que si perdía el cinturón, automáticamente tenía la revancha. Dana (White, presidente de la UFC) se acercó y me dijo que si no lo quería hacer no había problema, pero es un derecho que tengo. Así que voy a pelear otra vez contra Weidman.
Ahora tienes nueve peleas más. ¿Será tu último contrato? Tengo 38 años. Al final de las peleas tendré 40. Entonces no sé si firmaré otra vez.
Tenías un contrato con el Corinthians, después de cada pelea se te veía con la camiseta del ‘Timao’. ¿Sigue esa relación? Ya no tengo ese patrocinio porque se acabó el contrato. Pero mi vínculo continúa, porque soy corinthiano desde niño. Estamos discutiendo la renovación, pero sigo siendo hincha y los corinthianos me apoyan siempre.
¿Ya sabes qué harás cuando te jubiles? Tengo una academia en Los Ángeles (EE.UU.), donde vivo. Tengo proyectos en el cine, como actor. Pero antes voy a acabar bien mi trayectoria como luchador.
¿Cómo va esa carrera de actor? Es mucho más difícil. Es un mundo completamente nuevo que no entiendo mucho y no domino. Tengo que estudiar bastante y con dedicación. En el poco tiempo que le puedo dedicar ahora me esfuerzo mucho, pero no es fácil.
Se habló de un combate contra el boxeador Roy Jones Jr. ¿Es verdad? Ese es mi gran objetivo, tener una pelea de boxeo con Roy Jones. Pero eso depende mucho de la UFC, estoy esperando el permiso. Es un deseo personal que tengo, un sueño.
¿Es cierto que piensas competir en taekwondo en los JJ.OO. de Río 2016? Quiero, pero es poco viable. Conversé con la Federación y tengo que participar en varias competiciones para clasificar, pero no tengo tiempo.
Hay mucha más gente fanática de la MMA en Brasil. ¿Crees que en algún momento ese crecimiento superará al del fútbol? No, es muy difícil porque el fútbol es algo tradicional. Todos son hinchas de un equipo y todos los días hay un partido por ver. Eso no se cambia.