Una jueza española emitió una orden de detención contra el destituido presidente catalán Carles Puigdemont, según reveló ayer su abogado Paul Bekaert a la cadena televisiva VRT.
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Cesado la semana pasada de sus funciones por el gobierno central español, Puigdemont huyó a Bruselas, Bélgica, y desoyó una convocatoria de la justicia de su país.
Interrogado sobre si Puigdemont permanecerá en Bélgica, el abogado Bekaert respondió: ‘Por supuesto. Prometió cooperar plenamente con las autoridades belgas’. Bekaert agregó que si la solicitud de extradición es aprobada por un juez belga, el líder catalán apelará dicha decisión.
Por su parte, la jueza Carmen Lamela ordenó ayer la detención del vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, y de otros siete miembros del gabinete de Puigdemont, acusados de sedición, rebelión y malversación de fondos públicos.
Lamela los envió a ‘prisión provisional’ sin fianza al considerar que jugaron ‘un papel activo, impulsando el proceso soberanista’.
En un mensaje emitido por la televisión pública catalana, Puigdemont exigió la liberación de los consejeros y del vicepresidente Junqueras y ‘el fin de la represión política’.
