Estados Unidos. Bradley Jean Hubbard (23) fue acusado por haber violado a su perra pitbull de nombre ‘Baby Girl’ por tres años. Se estima que el sujeto cometió el abuso al menos 100 veces durante ese tiempo, a pesar de los quejidos, aullidos y llantos de su mascota.
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Según informó el medio Pensacola, durante ese período de tiempo, Bradley vivía con su padre y la pareja de él. Sin embargo, un miembro de la familia (que también vivía en la casa) no soportó más y lo denunció a la policía el pasado 28 de diciembre.
La mujer confiesa que escuchó los gemidos de la canina un par de veces, hasta que decidió observar por un agujero del cuarto del joven y ver lo que realmente estaba ocurriendo. ‘No podía aguantar más’, admite sobre la situación acontecida en la ciudad de Pensacola (Florida).
La testigo señala que al principio escuchaban muchos quejidos pero que, con el tiempo, ‘Baby Girl’ dejó de hacer ruido. La declarante cuenta que Bradley se llevaba a la perrita a su cuarto y que este hecho comenzó a adquirir frecuencia con el tiempo.
Cuando llegó la policía a arrestar al abusador, su padre negó las acusaciones; sin embargo, reportes anteriores señalaban que el hombre ya había ocultado otras actividades delictivas y abusivas de su hijo.
El reporte veterinario concordó con la denuncia, en donde se demostró que la perra tenía los genitales dañados por el abuso. Los médicos también aseguraron que el comportamiento de ‘Baby Girl’ era agresivo y solo se tranquilizaba cuando veía a Bradley.
‘El ocultaba la evidencia de la violación diciendo que la pitbull estaba en celo’, cuenta la declarante. Finalmente el violador fue encerrado en una cárcel de Escambia (Florida, EEUU) y debe pagar una fianza de 15,000 dólares.
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