Julio Castillo Solano (56), trabajador de la Municipalidad de San Miguel, cayó de la tolva del camión en el que se movilizaba, debido a que las tablas que transportaba se enredaron con un cable telefónico que se encontraba apenas a tres metros del suelo en el cruce del jirón Libertad y Escardó.
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‘Cayó de cabeza y esto le ha producido un traumatismo encéfalo craneano. La municipalidad dispuso su traslado a una clínica cercana. Su estado es estable pero permanece en observación’, le dijo a Publimetro Luis Luna, subgerente de Defensa Civil de la Municipalidad de San Miguel.
Este caso actualiza el problema de las marañas de cables aéreos (de telefonía fija, TV paga e Internet) que vemos en las calles de nuestra ciudad.
‘Los gobiernos locales tenemos limitaciones para fiscalizar y sancionar a estas empresas. No necesitan una autorización expresa de las municipalidades y por eso el abuso indiscriminado en la instalación de estos cables’, declaró por su parte Hernán Ampuero, gerente municipal de San Miguel.
Para Luna, el responsable de esta situación es el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel), que regula las telecomunicaciones en nuestro país.
Sin embargo, voceros de Osiptel nos dijeron que esta entidad no tiene ninguna injerencia en el tendido de cables, pues sus competencias están destinadas únicamente a garantizar la calidad y eficiencia del servicio y la fijación de sus tarifas.
‘El Reglamento de la Ley N° 29022, Ley para el Fortalecimiento de la Expansión de Infraestructura en Telecomunicaciones (…) establece que las municipalidades distritales cuentan con competencias para supervisar, fiscalizar y sancionar a las empresas que brindan servicios públicos de telecomunicaciones por la instalación de infraestructura. Los cables de los servicios de telefonía son considerados como infraestructura por la normativa vigente’, respondió Osiptel a nuestros cuestionamientos.
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De similar opinión fueron las fuentes del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) consultadas por Publimetro.
‘Cualquier tema de infraestructura en la vía pública, que incluye por dónde van los cableados, depende de las municipalidades distritales. Además, cualquier verificación también está a cargo de ellos’, nos aseguraron en el MTC.
Pese a ello, el municipio de San Miguel insiste en que no posee las herramientas necesarias para realizar esta fiscalización.
‘Si un cliente no está conforme con el cable que le han puesto, ¿qué hace la compañía? Vuelve a subirse por los techos, amarra en los postes, clava en las paredes, mete el cable por la ventana y se lo instalan. Así es como se forman las marañas de cables. ¿En qué momento participó la municipalidad? ¿Acaso llaman a la municipalidad para ponerle cable a su televisor?’, se pregunta Luna.
En marzo del año pasado, la Municipalidad de San Miguel emitió la ordenanza 027-2015, en la que exhorta a las compañías de telefonía y al MTC a retirar los cables que ya estén fuera de servicio. Pero eso es todo.
‘Lamentablemente, no nos hacen caso y nosotros no tenemos mayor injerencia sobre los cables. No damos licencias para su tendido. Justamente eso es lo que le pedimos’, afirma Luna.
Por Mauricio Niño
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