Las autoridades federales de Estados Unidos descubrieron el túnel más largo jamás encontrado por el que se traficaba droga desde México.
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Del lado estadounidense, la entrada se ubicaba en una parcela privada y conducía hasta una casa decrépita en el lado mexicano.
La vía subterránea tiene 800 metros de longitud.
Conecta la localidad californiana de Otay Mesa, cerca de San Diego, con la ciudad mexicana de Tijuana.
Estaba equipada con luces, un sistema de ventilación y hasta un ascensor.
Las autoridades dieron con el túnel tras ocho meses de investigación.
La operación permitió detener a seis personas y decomisar unos 5.600 kg de marihuana y casi mil kilos de cocaína, la mayor confiscación realizada hasta ahora en California.
