La oposición en Brasil marchó ayer en 438 ciudades del país para pedir la destitución de la presidenta Dilma Rousseff, en medio del rechazo a su gobierno, que culmina el 2018, y a su partido (el Partido de los Trabajadores, PT) por el caso Petrobras .
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Imágenes aéreas mostraron una marea de gente vestida de amarillo y verde, los colores de la bandera brasileñal, en la capital Brasilia, donde protestaron unas 100 mil personas.
Esta escena se repitió en Rio de Janeiro, ciudad que será sede de los Juegos Olímpicos en agosto próximo.
Los manifestantes protestaron por el derrumbe de la economía, que cayó 3,8% en el 2015 y por el caso de corrupción de la petrolera estatal Petrobras , desde donde se habrían desviado millonarios fondos a empresarios y políticos como el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Como se sabe, el exmandatario está siendo investigado por lavado de dinero y ocultación de patrimonio.