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ZOË MASSEYFotógrafa@ZoePix
Ando tratando de estar desconectada de la locura colectiva preelectoral en una especie de autoterapia de control de ira. Trato de no empezar el día viendo las noticias, pero ayer una me removió el estómago y –por lo que he podido ver en redes sociales- no solo a mí.
Dos viajeras argentinas han sido asesinadas en Montañita, Ecuador. Muchos se indignan, muchas se sienten identificadas, muchos más muestran su apoyo a las familias hoy destruidas. Y me quedan preguntas. ¿Cuántas mujeres son asesinadas en nuestro país y solo sus familias lloran por ellas? ¿Es que ya se nos hizo tan común el feminicidio en el Perú que no nos toca los poros? ¿O es ‘simplemente’ que una noticia local no mueve tanto como una extranjera?
Me queda eso dando vueltas en la cabeza y con ese nudo de saber que vivimos en constante riesgo de ser agredidas solo por ser mujeres, me pongo a ver qué estarán dando en Lima que pueda quitarme este nudo. Primero caigo en un stand up comedy llamado Mujer que no jode es hombre. Aunque tal vez sea muy divertido, al entrar y leer la reseña, no me quedan muchas ganas de saber más: ‘Las mujeres siempre han sido un gran enigma. Se dice que son locas, manipuladoras, temperamentales, problemáticas, histéricas, compulsivas, celosas, pero sobre todo jodidas’. ¿Por qué siempre nos estereotipamos así? ¿Seremos las mujeres mismas más machistas que los hombres que criticamos? Si alguien la vio y le gustó, por favor que me cuente.
Sigo buscando y encuentro esto que sí me llama la atención: el Centro Cultural España presenta la exposición Todos vivimos en Macholandia. La reseña me cuenta sobre este sexismo sutil y cotidiano que en nuestro país terminamos tomando como una broma o hasta como costumbre. ‘Macholandia pretende no solo cuestionar su existencia, sino interpelar a los asistentes y generar reflexión sobre sus causas; porque el machismo es un problema que afecta el desarrollo de mujeres y hombres. Desde el 2014, Macholandia ha sido presentada en parques públicos, colegios y universidades con gran participación del público’.
Entro a curiosear y veo que es un equipo multidisciplinario (convocado por CiudadaníasX) que hace activismo cultural, usando el arte como herramienta para enfrentar la discriminación. Suena interesante.
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Entro a la página de Macholandia en Facebook y leo un comunicado sobre la muerte de estas dos chicas argentinas. Estamos en la misma línea. De yapa, en el mismo centro cultural hay un festival de cine de directoras mujeres, todos los martes del mes a las 5 p.m. Y la entrada también es libre.
Creo que en el 2016 la igualdad de género ya no debería ser un tema de debate. Simplemente debería existir. Pero tenemos mucho aún por avanzar y duele. No soy una feminista ni creo en extremos. No creo que una mujer deba tener ‘más’ derechos que un hombre y sé que hay muchos hombres maltratados también, que por vergüenza no lo denuncian. Pero no nos engañemos, a las mujeres, el acoso callejero nos vulnera el derecho al libre tránsito.
En enero del 2016, ocho mujeres fueron asesinadas y 15 agredidas se salvaron de morir. Piénsalo. Mujer que no jode es mujer.
