La oposición venezolana comenzó el miércoles su trabajo al frente del Parlamento con la mira puesta en definir en un máximo de seis meses un camino para sacar del poder al presidente Nicolás Maduro.
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Mientras tanto, se ha ocupado de quitar del recinto todas las imágenes del exmandatario Hugo Chávez. Una clara señal de los nuevos y conflictivos tiempos que se avecinan.
“La historia también es que esta Asamblea Nacional ha tenido durante 15 o 16 años distintas etapas de protagonismo, y ese hombre que está ahí, no es para que nosotros precisamente permitamos que lo mancillen, que lo ofendan o que pretendan sacarlo así como un coroto viejo”, dijo el legislador oficialista Víctor Clark.
Con la asunción de la nueva Asamblea Nacional el martes, controlada por la oposición, se rompieron 17 años de hegemonía chavista parlamentaria.
Ante las protestas, los funcionarios retiraron las fotografías de la calle y las guardaron en una habitación del edificio.
