En el Perú, más de siete mil personas sufren de cáncer de piel (Fuente: MINSA, 2014). Con el fin de disminuir el impacto de esta enfermedad se celebra este 6 de febrero el Día del Lunar. Esta fecha invita a la población a tomar conciencia que el Perú es uno de los países con mayor índice de luz ultravioleta a nivel Latinoamérica, llegando a 12 o 13 en Lima y hasta 15 en ciudades como Arequipa y Junín; condición que puede originar la aparición de cáncer en la piel.
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‘Es de vital importancia, el diagnóstico precoz del cáncer, la técnica que ha demostrado los mejores resultados es el denominado Autoexamen mensual de la piel, su realización es muy sencilla y de corta duración, con esto se consigue que las personas se familiaricen con sus lunares y tengan la capacidad de detectar cambios y nuevas lesiones’, indicó el doctor Gustavo Beltrán, dermatólogo de la Clínica Anglo Americana.
Asimismo, agregó que se aconseja realizar el despistaje dermatológico una vez al año para la población en general y cada seis meses para los grupos con mayores factores de riesgo para desarrollar melanoma maligno.
La detección del cáncer de piel se basa en la búsqueda de signos de crecimiento irregular de las lesiones sospechosas, los parámetros que se usan se resumen en el A, B, C, D, E que son las iniciales de Asimetría, Bordes, Color, Diámetro y Evolución. Generalmente, la estructura de los lunares benignos es redondeada u ovalada, simétrica, con 1 o 2 colores. Si un lunar presenta bordes irregulares, asimetría, más de 3 colores, crecimiento progresivo o signos de sangrado, prurito o inflamación, debemos sospechar el desarrollo de una lesión maligna y acudir rápidamente al dermatólogo para su evaluación.
Según varios estudios, las quemaduras que se sufren durante la niñez, son las responsables del desarrollo de cáncer de piel en la edad adulta, por lo que es muy importante que los padres de familia protejan a sus hijos apropiadamente.
Las quemaduras solares afectan el ADN, sufriendo mutaciones que son reparadas por distintos mecanismos de la piel, pero conforme el daño se va acumulando, los propios mecanismos de reparación se ven comprometidos provocando la aparición de lesiones dependientes de la exposición solar crónica como el fotoenvejecimiento hasta llegar a extremos como el cáncer cutáneo.
El sol es bueno para la salud, siempre y cuando no exista un abuso en la exposición, es por eso que las personas deben evitar las horas punta de luz ultravioleta que se dan entre el mediodía y las tres de la tarde, además es necesario que se protejan físicamente con ropa con protección solar, gorros, lentes y bloqueadores solares que garanticen una protección UVA y UVB.
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‘Un bloqueador solar moderno debería cumplir tres funciones. Proteger eficientemente la piel de la luz ultravioleta A y B, contener principios activos que hidraten la piel y contribuir a reparar el daño sobre el ADN causado por el sol. Sin embargo, la población no debe verlos como única alternativa de protección ya que son métodos de cuidado que funcionan en conjunto con otras acciones preventivas’, indicó el especialista.
Cabe resaltar, que un niño menor de 6 meses no debe exponerse al sol ni usar bloqueadores solares, para evitar reacciones alérgicas. A partir de los siete meses los padres de familia deberán aplicar protectores pediátricos, cuya formulación es especial para el tipo de piel del infante.
Finalmente el especialista señaló que otro de los factores que ocasionan la aparición de cáncer de piel es el uso de los solárium, centros donde exponen a las personas a rayos ultravioletas con el objetivo cosmético de broncear la piel. ‘Su uso ha sido reconocido por la Organización Mundial de la Salud como un factor importante en la aparición del cáncer cutáneo’, finalizó.