Ya terminó la cuenta regresiva en Australia.
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2015 comienza y se lo recibe con fiesta en una sociedad conmocionada por recientes hechos de violencia.
Como es tradición, la bahía de Sídney se tiñe de colores, aunque en esta ocasión rinden tributo a las víctimas de un secuestro reciente.
Las autoridades esperaban a más de un millón y medio de personas en esta celebración.
Desde Hong Kong hasta Londres, pasando por Nueva York y Rio de Janeiro, millones de personas celebrarán las doce campanadas con multitud de fuegos artificiales, conciertos y juegos de luces.
