La policía de Nueva York admitió el viernes haber matado a un joven “totalmente inocente” en un confuso episodio en Brooklyn, una tragedia que tiene lugar en medio de las fuertes críticas en su contra por el uso excesivo de la fuerza.
PUBLICIDAD
Akay Gurley, de 28 años y que no se encontraba armado, fue abatido de un disparo por un oficial el jueves por la noche en las escaleras de un complejo habitacional del barrio del sudeste de Nueva York.
“La persona fallecida es totalmente inocente. Lo que pasó anoche ha sido una tragedia muy desafortunada”, admitió este viernes el comisionado de policía, Bill Bratton, en una conferencia de prensa.
Según la versión de la policía, dos oficiales patrullaban el complejo y se encontraban en unas escaleras completamente a oscuras cuando se cruzaron a Gurley que entraba a ellas con su novia.
Uno de los oficiales efectuó un disparo, aparentemente de manera accidental según Bratton, que impactó en el pecho de la víctima.
El joven fue trasladado a un hospital de la zona, donde se lo declaró muerto.
La Policía de Nueva York está bajo el foco de las críticas desde que Eric Garner, de 43 años y sospechoso de vender cigarrillos ilegalmente, murió el pasado 17 de julio luego de ser sometido por la fuerza por varios policías blancos tras intentar resistirse en Staten Island (sur).