El RX100 MarkII sin duda generó benas críticas; sin embargo, el RX100MIII se presenta como una versión mejorada, principalmente por su capacidad de capturar 20.9 megapixeles y un sensor de imagen de tipo CMOS Exmor, el mismo modelo DSC-RX100MII.
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Además, el principal cambio que se percibe está en el lente objetivo. Ahora puede ir más allá que el RX100MII, ya que tiene una apertura de 24-70 mm con f/1.8-2.8. Incluye, también, un visor electrónico Tru-Finder OLED con resolución SVGA (1.440.000 puntos). Asimismo, va a ser capaz de grabar videos en formato XAVC S.
El diseño sigue siendo el original que la marca nipona mostraba hace un par de temporadas, con cuerpo superdelgado de poco más de tres centímetros y medio de grosor, acabado en color negro. El peso también seguirá rondando el cuarto de kilo, como el de sus antecesoras (sin accesorios). Y la parte posterior de la máquina va a estar ocupada por una pantalla de tres pulgadas que se puede inclinar hacia arriba hasta 180 grados, para favorecer los disparos desde distintos ángulos.
Los soportes admitidos para grabar las imágenes son tarjetas de memoria SD, SDHC, SDXC, Memory Stick Duo, Memory Stick PRO Duo y Memory Stick PRO HG Duo. Igualmente, incorpora un flash integrado con corrector de ojos rojos.
El RX100M3 será lanzado en junio a US$ 799.99. Es una cámara de bolsillo, pero Sony también quiere vender la idea de que esto puede ser la cámara “multiuso” para muchos consumidores.
