Manuel Pulgar-Vidal, ministro del Ambiente, manifestó ayer en declaraciones a RPP que la etapa de saneamiento minero -que se inició el pasado domingo, tras vencerse el plazo para la formalización-apunta a ‘cerrarle todas las puertas’ a la minería ilegal.
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‘El Gobierno ha mostrado resultados concretos: 800 máquinas destruidas, una tonelada de oro ilegal decomisado, el control de exportadores ilegales. Ahora toca dar el salto cualitativo para acabar con esto’, afirmó.
Para esta nueva etapa se ha dispuesto el control de combustibles para la región Madre de Dios, la regulación de insumos químicos y de las exportaciones ilegales, el control de maquinarias, la regulación contra la trata de personas y la promoción del desarrollo.
El funcionario recordó que la minería ilegal es ‘una lacra sustentada en problemas de leyes, políticas, jueves corruptos, falta de control y flexibilidad’. Por ello, recalcó que no se ampliará el plazo para la formalización.
Ante las críticas de los habitantes de Madre de Dios por las medidas de control que se impondrán, el ministro Pulgar-Vidal señaló: ‘No es para ustedes el control, sino para los mineros ilegales que los están matando y generando condiciones de pobreza que van a sufrir ustedes y sus hijos’.
