El teléfono prototipo del proyecto Ara responde a la visión de Google de tener un dispositivo modular con un endoesqueleto que sirve como base para realizar modificaciones y cambiar piezas.
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Según el líder de proyecto, Paul Eremenko, el prototipo tendrá 8 secciones en la parte trasera para pequeños módulos, dos en la parte delantera para la pantalla y los botones, un módulo para la fuente de poder y uno para los datos. Todos los módulos quedarán fijos a sus espacios a través de magnetos eléctricos permanentes. Se espera que el Ara salga en diferentes tamaños, incluyendo modelos de tipo phablet.
La idea del Ara es que los usuarios puedan mejorar o modificar el dispositivo según sus propias necesidades y gustos. Para facilitar este objetivo el ecosistema del hardware será abierto, lo que le permitirá a muchos desarrolladores participar con sus propias invenciones.
Entre los componentes que ya se han desarrollado existe un oxímetro para la medición de los niveles de oxígenos en sangre. Otro ingenio en vías de desarrollo es una cámara con lentes infrarrojos. Por supuesto, muchas de estas opciones son casi imposibles de considerar para un dispositivo de fabricación masiva, pero como opciones de módulos resultan más lógicas y sostenibles. También se especula que parte de la carcasa y varios componentes podría ser fabricados utilizando impresoras digitales.
*Google tiene planeado probar el smartphone con un modelo básico para América central y América del sur, esta opción incluiría un módulo para wifi, chipset, pantalla y batería, y su costo de fabricación sería de 50 dólares.
La primera conferencia para desarrolladores se efectuará el 15 y el 16 de Abril y ya tiene unas 3.328 empresas registradas. Resulta claro que la flexibilidad del dispositivo lo ubica como una opción interesante para un gran abanico de industrias y actividades relacionadas con la tecnología.
