Una nueva ola de protestas en topless han protagonizado a lo largo de este jueves integrantes de la organización feminista Femen en varias ciudades de Europa. En la capital ucraniana, Kiev, un grupo de jóvenes semidesnudas se manifestaron luego de que la policía de Ucrania las acusó de portar armas en su oficina.
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De acuerdo con las activistas la policía les ‘plantó’ una pistola y una granada de mano en su oficina. Ahora a las mujeres conocidas por sus protestas con el pecho al descubierto, les amenazan largas penas de prisión.
La activista Alexandra Shevchenko acusó a las autoridades de querer vengarse del grupo feminista. Las mujeres no estuvieron durante días en su oficina, de modo que el servicio secreto pudo haber escondido allí las armas, indicó Shevchenko a la agencia de noticias dpa.
Un portavoz policial dijo al diario online ‘Ukrainskaya Pravda’ que* el motivo del registro fue una indicación anónima sobre un explosivo*. Ahora sobre las integrantes de Femen pesa la amenaza de investigaciones debido a posesión ilegal de armas, penada hasta con siete años de prisión, aseveró Shevchenko.
‘Eso apunta a que nos quieren meter en la cárcel para neutralizar a Femen’, señaló la activista de 25 años, que también responsabilizó al servicio secreto ruso.
El grupo feminista actuó varias veces llamando la atención contra el presidente ruso, Vladimir Putin, por ejemplo durante la pasada feria industrial de Hannover en Alemania. En la protesta de hoy, expresaron que su cuerpo es la única arma. ‘My body, my weapon’.
‘Resistimos, ¡nuestras armas son nuestros pechos! No usamos bombas o pistolas, esas son armas de dictadores y represores. Nuestras armas son pacíficas’, puntualizaron.