Un hombre considerado unánimemente como “retrasado mental” y condenado a muerte por el asesinato de un preso sera ejecutado este lunes a las 19H00 locales (23H00 GMT) en Georgia (sureste de EEUU) a menos que la Suprema Corte de Justicia intervenga a última hora.
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Warren Hill, de 52 años, fue condenado a muerte luego de matar a otro recluso en 1990, en la prisión de Georgia, donde purgaba una pena a cadena perpetua por la muerte de su pareja.
En 2000, tres médicos diagnosticaron que Warren Hill no cumplía los criterios del Estado sureño los más estrictos del país para ser reconocido como retrasado mental”, el término jurídico empleado en este caso.
No obstante, los mismos médicos cambiaron su postura para señalar que Warren Hill era retrasado mental “más allá de una duda razonable”, luego de que en 2002 la Suprema Corte fallara que los enfermos mentales no pueden ser ejecutados.
En base a esa opinión médica, la defensa de Warren Hill presentó una primera apelación en julio de 2012, luego otra en febrero pasado, media hora antes de la inyección letal.
Pero en abril, un tribunal de apelaciones compuesto por tres jueces en Georgia rechazó la solicitud de los abogados.
