A la caza de errores en letreros publicitarios

El letrero luminoso de un chifa en la Av. México, en Comas, con la palabra ‘bienbenidos’ (en vez de ‘bienvenidos’) acaba de ser proclamado como el aviso con el error ortográfico ‘más original del país’ por la Asociación de Correctores de Textos del Perú (Ascot Perú), la librería El Virrey y el Grupo Editorial Mesa Redonda.

Estas entidades acaban de organizar el Primer Concurso de Fotografía Cacería de Erratas, una singular iniciativa que busca hacernos reflexionar sobre la importancia de la escritura y el trabajo del corrector de textos.

‘En abril, con motivo del Mes de las Letras, lanzamos el concurso e invitamos a los ciudadanos a enviar fotos de avisos y carteles publicitarios mal escritos’, explica Óscar Carrasco, lingüista y vicepresidente de Ascot Perú.

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El jurado escogió en segundo lugar a un afiche ubicado en el interior del Hospital Militar en Jesús María, que anuncia un ‘programa de especialización profecional (escrito con ‘c’ en lugar de ‘s’)’. Esta publicidad tenía los logos de entidades como el Ejército peruano y las universidades Alas Peruanas, San Marcos, Garcilaso de la Vega y Enrique Guzmán y Valle.

El tercer puesto recayó en un panel del Ministerio de Transportes y Comunicaciones y la Municipalidad Provincial de San Martín con un grave error de concordancia (se puso un ‘los’ en vez del artículo adecuado, ‘las’): ‘Respeten las señales de tránsito sobre todo los que son de carácter obligatorio’, dice el panel. Fue fotografiado en la ciudad de Tarapoto.

La mejor ‘cazadora’ fue Lérida Fernández (autora de la foto del chifa). Ella se llevó un diccionario y tres libros como premio. La ceremonia de premiación se llevó a cabo el martes pasado.

El segundo y tercer lugar, Brenda Sandoval y Eliana Gonzales respectivamente, ganaron tres libros cada una. ‘Queremos repetir el concurso. Probablemente en abril del próximo año, quizás ampliemos el plazo de presentación de las fotografías.

Este año solo se puso como plazo 27 días’, afirma Carrasco, quien asegura que la ortografía y la sintaxis siguen siendo un aspecto ‘subsidiario’ en los avisos. ‘La gente se fija más en los colores y el material. Esta preocupación no se da en el texto. Sin embargo, la ortografía y sintaxis son también cuestiones de calidad’, concluye.