Las gaseosas y los bocaditos forman parte del pasado. En la Universidad de Drexel, Filadelfia, los estudiantes cuentan con una expendedora de laptops.
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Para obtener un dispositivo, el alumno deberá utilizar su identificación y obtendrá una de las 12 MacBooks disponibles, que podrá ser utilizada por un tiempo máximo de cinco horas. En caso que se exceda el plazo, se deberá pagar cinco dólares.
La preocupación por la información personal está asegurada, pues el disco es limpiado completamente cuando regresa la laptop a la máquina expendedora, asegura un comunicado de la casa de estudios.
