La jueza Tonya Parker, magistrada gay de Texas, Estados Unidos, tiene la firme política de negarse a casar a las parejas heterosexuales en su tribunal hasta que el estado permita a los homosexuales casarse también.
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“Es un poco contradictorio llevar a cabo ceremonias que no se puedan realizar para mí. Por lo tanto, me niego a hacerlo”, dijo Parker hace un par de días.
La posición de Parker en beneficio del matrimonio gay lo ha llevado a duras críticas por los sectores más conservadores, pero también el apoyo de las minorías en Texas.
“Parker no está violando su juramento como jueza, sino que se niega a respetar las leyes de Texas”, escribió un columnista del Dallas Morning News. “Ella no está abandonando su deber, sino que lo hace desde una perspectiva distinta”.