El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) realizó una inspección a la playa Arica para verificar la contaminación por aguas servidas proveniente de una cámara de bombeo de Sedapal, y encontró que los valores físico-químicos están por encima del límite máximo permitido.
Por eso, ha dado 15 días a esta empresa para detener dicha acción. Sedapal tiene hasta el 11 de febrero para hallar una solución. 25 litros por segundo es el flujo de las aguas servidas que se vierten en la playa.